Objetivo del ritual

Crear un espacio de calma, apertura emocional y dulzura dentro de la relación. Tradicionalmente se utiliza para suavizar tensiones, atraer comprensión y reforzar los lazos afectivos.

Materiales

• Un frasco pequeño de vidrio con tapa (limpio)

• Miel natural

• Un papel blanco sin líneas

• Un bolígrafo de tinta roja o azul

• Una vela rosa o roja

• Un plato pequeño resistente al calor

• Cerillos o encendedor

• (Opcional) Canela en polvo

Preparación

1. Limpia el espacio donde realizarás el ritual.

2. Coloca el frasco, la vela y los materiales frente a ti.

3. Respira profundo y enfócate en intenciones positivas: comunicación, respeto, afecto.

Procedimiento Tradicional

1. Escribe los nombres

En el papel blanco, escribe:

• Tu nombre completo

• El nombre completo de tu pareja

Ubícalos de forma que los nombres se “encuentren”.
Puedes escribir tu nombre arriba y el de la otra persona debajo.

2. Dobla el papel

Dobla el papel hacia ti tres veces, mentalizando que la dulzura, la calma y la armonía regresan o se fortalecen entre ustedes.

3. Introduce el papel en el frasco

Colócalo en el fondo del frasco.

4. Añade la miel

Vierte miel lentamente, cubriendo completamente el papel.
Mientras lo haces, piensa en los momentos positivos, en la ternura y en el afecto que deseas fomentar.

(Opcional) Espolvorea un poco de canela para simbolizar calidez y pasión equilibrada.

5. Enciende la vela

Prende la vela rosa o roja y colócala sobre el plato.
Mientras la vela se consume, mantén el frasco de miel cerca.

Visualiza la relación llena de dulzura, serenidad y entendimiento.

Oración Tradicional del Endulzamiento

Puedes recitarla en voz baja o mentalmente:

“Que la dulzura de esta miel suavice nuestros corazones.
Que las palabras sean amables,
que la comunicación sea clara,
que la comprensión florezca entre nosotros.
Que (nombre de la pareja) y yo encontremos armonía,
respeto, cariño y buena voluntad.
Que la luz que hoy enciendo ilumine nuestro camino
con paz, afecto y unión sincera.
Así sea, así es y así será.”

Cierre del ritual

• Espera a que la vela se consuma de manera segura.

• Guarda el frasco en un lugar tranquilo (puede ser un cajón o un espacio personal).

• No necesitas abrirlo ni moverlo constantemente; simplemente déjalo ahí como símbolo de tu intención.

Recomendación importante

Este tipo de rituales funciona mejor cuando se acompaña con acciones reales: comunicación, empatía, escucha activa y atención a la relación.
El ritual es simbólico, un espacio para reflexionar, no un medio para controlar a alguien.